El artículo 22 del Código del Trabajo de Chile actualmente establece una semana laboral de 45 horas divididas entre un mínimo de 5 días y un máximo de 6, por lo que Chile es uno de los países con jornadas laborales más largas del mundo. No obstante, en la actualidad, los niveles de productividad de los trabajadores de Chile son bajos en comparación con otros miembros de la OCDE.  

El proyecto de ley había quedado paralizado en el Congreso desde su presentación en 2017, durante la administración de Sebastián Piñera. Su objetivo era modificar el Código del Trabajo y reducir la semana laboral a 40 horas, en consonancia con los límites legales establecidos en la mayoría de los países de la OCDE. 

La administración de Boric avivó los esfuerzos para aprobar el proyecto de ley de 40 horas en la Comisión de Trabajo del Senado.

El máximo semanal de 40 horas puede repartirse en un mínimo de 4 días y un máximo de 6 días por semana.

Los gerentes, directores y todos aquellos que, debido a la naturaleza de su trabajo, desempeñen su actividad sin supervisión inmediata siguen quedando excluidos del límite de la jornada laboral ordinaria.

El proyecto de ley también contiene otras enmiendas relacionadas con la conciliación del trabajo y la familia y las jornadas de trabajo especiales.

La aplicación del proyecto de ley seguirá un proceso gradual de 5 años, que comenzará con 44 horas semanales el primer año, 42 horas el tercer año y 40 horas el quinto año de su aplicación, con el objetivo de ayudar a las empresas a adaptarse a las nuevas jornadas laborales.  

La Asociación de Emprendedores de Chile declaró que la reducción de la jornada laboral, estrechamente relacionada con el aumento del salario mínimo y los efectos de la futura reforma de las pensiones, implicaría un aumento de los costes laborales para las pymes de entre el 30 % y el 40 %.

Recientemente, ha habido varios ejemplos de reducción de la jornada laboral en el Reino Unido, España y otros países de Europa que principalmente consisten en programas piloto para implantar una semana laboral de cuatro días.

En América Latina, Colombia también ha reducido recientemente la jornada laboral, como ya informamos aquí. 

El Estado norteamericano de California cambió la semana laboral estándar a 32 horas.

Estos cambios también han dependido enormemente del debate y la legislación sobre conciliación laboral y familiar, que se ha codificado en Europa con una directiva especial, y que otros países del mundo están introduciendo de forma gradual en su legislación nacional.

Aquí pueden consultar el informe mundial titulado Working Time and Work-Life Balance Around the World (El tiempo de trabajo y el equilibrio entre el trabajo y la vida privada en el mundo), que analiza exhaustivamente las jornadas laborales y la organización del tiempo de trabajo y sus efectos en la conciliación familiar y laboral de los trabajadores.