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Working time and work-life balance around the world (un informe de la OIT)

  • El 6 de enero de 2023, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) publicó un nuevo informe titulado Working Time and Work-Life Balance Around the World (El tiempo de trabajo y el equilibrio entre el trabajo y la vida privada en el mundo), que ofrece un análisis exhaustivo de las horas de trabajo y la organización del tiempo de trabajo y sus efectos en la conciliación familiar y laboral de los trabajadores.
  • Es el primer informe mundial que la OIT realiza sobre este tema.

En las últimas décadas, mejorar y facilitar la conciliación familiar y laboral se ha convertido en un tema cada vez más importante para los responsables de la formulación de políticas. Esta necesidad aumentó con la pandemia, cuando los trabajadores comenzaron a buscar nuevos empleos que les ofrecieran una mayor flexibilidad y la posibilidad de trabajar a distancia.

El informe no abarca la leyes nacionales relacionadas con el tiempo de trabajo. No obstante, examina los principales modelos y avances mundiales relacionados con el número de horas de trabajo y la organización del tiempo de trabajo (horarios de trabajo). Asimismo, analiza las coincidencias y los desajustes entre las horas de trabajo reales de los trabajadores y las horas de trabajo que estos prefieren sobre la base del Módulo IV de Orientaciones Laborales del Programa Internacional de Encuestas Sociales (ISSP) de 2015.

Revela que, a nivel mundial, un tercio de todos los trabajadores normalmente trabajan más de 48 horas a la semana,

 

mientras que una quinta parte de la fuerza de trabajo mundial tiene un horario de trabajo reducido (a tiempo parcial) o trabaja menos de 35 horas semanales.

El informe analiza las modalidades de ordenamiento del tiempo de trabajo actuales más destacadas, y revela que se ha producido un aumento de las modalidades flexibles en las últimas décadas. Los de sistemas de trabajo por turnos, a tiempo parcial, de trabajo flexible y los sistemas de cuenta corriente del tiempo de trabajo; las semanas de trabajo comprimidas y los planes de promediación de horas de trabajo, incluidos los sistemas de horas anualizadas, son cada vez más comunes.

El análisis muestra que la clásica semana de trabajo estándar (ocho horas al día, cinco o seis días por semana) proporciona estabilidad a los trabajadores para planificar sus vidas. Aún así, los horarios fijos son a menudo demasiado rígidos para lograr conciliar los compromisos laborales y no laborales. Este equilibrio puede alcanzarse con el trabajo por turnos, lo cual, no obstante, puede exigir a los trabajadores que desempeñen sus tareas durante horas atípicas, con riesgos importantes para la salud y peturbaciones significativas en la vida familiar. 

El trabajo a tiempo parcial (menos de 35 horas a la semana) con horarios predecibles proporciona a los trabajadores más tiempo para sus cumplir sus responsabilidades y disfrutar de actividades de ocio, lo que da lugar a un mejor equilibrio entre el trabajo remunerado y la vida personal.

El informe también analiza las horas de trabajo reales en comparación con el número de horas que prefieren los trabajadores, y destaca que trabajar más horas de las deseadas tiene efectos negativos, no solo en la conciliación familiar y laboral, sino, de forma más general, en los indicadores del bienestar de los trabajadores, como la satisfacción personal y profesional y la salud física y mental.

Por último, el informe ofrece un resumen de las medidas de respuesta a la crisis relacionadas con el tiempo de trabajo que los gobiernos y las empresas utilizaron durante la pandemia de COVID-19, como el trabajo compartido, la jornada reducida o el teletrabajo desde casa.

Este informe mundial sugiere la necesidad de fomentar las horas de trabajo reducidas y ofrecer unas modalidades de ordenamiento del tiempo del trabajo más flexibles, como los horarios flexibles y el teletrabajo. 

Este tipo de políticas ayudaría a mejorar la conciliación familiar y laboral y, por consiguiente, beneficiaría tanto a trabajadores como a empleadores. Según el informe, una conciliación sana entre la vida personal y profesional de los empleados también es beneficiosa para los empleadores y tiene algunos efectos positivos para las empresas: las empresas que ponen en marcha políticas de conciliación se benefician de una mayor retención de los empleados actuales, mejoran el reclutamiento, tienen índices de absentismo más bajos y una mayor productividad.