Este informe de políticas hace hincapié en el importante papel del diálogo social para garantizar una transición justa. Subraya el modo en que el diálogo social continuo entre trabajadores, empleadores y representantes de los gobiernos, así como el respeto de los principios y los derechos fundamentales en el trabajo, incluida la libertad sindical y la negociación colectiva, son fundamentales para una transición justa. También reitera que una transición justa debe proteger la seguridad y la salud de los trabajadores en los entornos laborales actuales y anticipar y prevenir nuevos riesgos relacionados con los recientes procesos de trabajo en un mercado laboral descarbonizado.

Asimismo, subraya la necesidad de proteger la salud de los trabajadores y del planeta, fuertemente afectado por el cambio climático, y de mantener al mismo tiempo el empleo, el trabajo decente y una economía mundial resilientes. En consecuencia, la SST también beneficia a los empleadores, ya que contribuye a que los lugares de trabajo sean seguros, saludables y productivos.

Se prevé que el cambio climático provoque una reducción de la productividad y pérdidas laborales y económicas debido al estrés térmico, la radiación UV, la propagación de enfermedades infecciosas, la disminución de la calidad del aire, los fenómenos meteorológicos extremos y los riesgos psicosociales. Por ello, la OIT señala que las políticas de empleo y las medidas de adaptación al cambio climático deben desarrollarse teniendo en cuenta los principios fundamentales de la SST como parte integral de una transición justa. El informe de políticas hace un llamamiento a todos los interlocutores sociales para que aspiren a una transición justa, que tenga en cuenta tanto la dimensión social de la acción climática como las oportunidades económicas que surgen de la gestión eficaz de este proceso.

El informe forma parte de una serie de documentos sobre la aplicación de las Directrices de la OIT para una transición justa hacia economías y sociedades ambientalmente sostenibles para todos, adoptadas por los interlocutores sociales en 2015. Este informe de políticas tiene por objeto presentar los vínculos entre la transición justa y la SST, y proporcionar a las partes interesadas información y recomendaciones para su aplicación. El informe incluye además algunos ejemplos interesantes sobre el modo en que algunos países, como Australia, Qatar y Uruguay, están actuando para abordar la SST frente al cambio climático.