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Nueva Zelanda: Ley de enmienda de las relaciones laborales (ampliación del plazo de presentación de reclamaciones personales por acoso sexual) de 2023

Este proyecto de ley modifica la Ley de Relaciones Laborales del año 2000, y concede a las víctimas de acoso sexual más tiempo para presentar una denuncia. La ley no recibió un apoyo unánime, dado que aquellos que no la respaldaron consideraban que ampliar el plazo de presentación de denuncias personales por acoso sexual no estaba justificado en comparación con otras denuncias personales ―por ejemplo, las relacionadas con el acoso racial o de otro tipo. 

Durante el proceso del comité restringido, se presentaron 43 comunicaciones en las que se enumeraban casos de acoso sexual en el lugar de trabajo y se explicaba por qué un plazo de 90 días era insuficiente para que una persona procesara lo ocurrido y presentara una denuncia.

Los empleados pueden seguir la vía de la Comisión de Derechos Humanos, que tradicionalmente ha concedido un plazo de 12 meses para denunciar, o el proceso de reclamación personal, que ahora ha sido modificado sistemáticamente. 

Es fundamental tener en cuenta que, según el artículo 65 «Forma y contenido del contrato individual de trabajo» de la Ley de Relaciones Laborales de 2000, los contratos individuales de trabajo «deben incluir» una explicación clara y sencilla de los servicios disponibles para la resolución de los problemas que puedan surgir en la relación laboral. 

La legislación se aplicará, con los nuevos plazos introducidos, con independencia de aquellos especificados en el contrato de trabajo, que puede actualizarse a la primera oportunidad que se presente. De forma alternativa, los empleadores pueden redactar una carta de variación del contrato individual de trabajo existente que contenga las novedades legislativas.

Los empleadores que incumplan el artículo 65 se exponen, en una acción presentada por un inspector de trabajo o el empleado afectado, a una sanción impuesta por las autoridades.

Además, si se tiene en cuenta la creciente importancia de esta cuestión, los empleadores deberían poner en marcha procedimientos internos para prevenir y gestionar los casos de acoso sexual en el lugar de trabajo.