Casi un año y medio después de su presentación por parte de la Comisión Europea, los Ministros de Trabajo europeos aceptaron iniciar las negociaciones sobre una orientación general para la propuesta. 

Como informamos previamente, la directiva propuesta está destinada a mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de plataformas facilitando la correcta determinación de su situación laboral a través de una presunción legal refutable. Además, pretende mejorar la protección de los datos personales de los trabajadores de plataformas mejorando la transparencia, la equidad y la rendición de cuentas en el uso de sistemas automatizados de supervisión o toma de decisiones. 

Veintidós Estados miembros aprobaron el texto de la orientación general en el Consejo de Empleo y Asuntos Sociales de Luxemburgo (EPSCO). Solo cinco ―Estonia, Alemania, Grecia, Letonia y España― se abstuvieron. No hubo votos en contra.

No obstante, la aprobación distaba de ser una conclusión predestinada. Por una parte, algunos Estados miembros habían exigido un texto más ambicioso basado en una potente presunción legal. En cambio, otros Estados miembros solicitaron excepciones más explícitas a la presunción. 

En una declaración conjunta, los países que habían preferido unas salvaguardias más firmes para los trabajadores, confirmaron la voluntad de los Estados miembros de avanzar con las negociaciones y participar en nuevas conversaciones con el Parlamento Europeo y la Comisión, a fin de obtener un texto definitivo para toda la UE antes de las elecciones de 2024.