Los sindicatos nacionales franceses CFDT, CFTC y FO (la Confederación Francesa Democrática del Trabajo, la Confederación Francesa de Trabajadores Cristianos y la Confederación General del Trabajo - Fuerza Obrera) han firmado el proyecto de convenio en representación de los trabajadores. Por su parte, el MEDEF, la confederación de pymes y el sindicato de empresas locales lo han firmado en representación de los empleadores.

El convenio establece dos medidas principales: 

1) la generalización de reparto de beneficios en empresas con menos de 50 empleados y 

2) la obligación de negociar sobre el valor de los beneficios en caso de resultados excepcionales.

Según las disposiciones que serán aplicables de forma experimental durante cinco años, a partir del 1 de enero de 2025, las empresas con menos de 50 empleados tendrán que ofrecer al menos un régimen de reparto de beneficios —obligatorio (participación) u opcional (intéressement), primas de reparto de valor (VSB), etc.— si se cumplen las siguientes condiciones:

- están constituidas como una empresa comercial;

- tienen un beneficio neto fiscal positivo de al menos el uno por ciento de las ventas durante tres años consecutivos;

- aún no están amparadas por un plan de participación en los beneficios, excepto las VSB, cuando alcancen los beneficios netos fiscales mencionados.

Además, las empresas con 50 empleados o más, con al menos un/a delegado/a sindical y sujetas a la obligación de establecer la participación obligatoria en los beneficios tendrán que negociar con los sindicatos cuando logren unos resultados excepcionales en Francia.

Esta obligación concierne al pago automático de un suplemento de participación en los beneficios obligatorio u opcional, o al aplazamiento del pago de un plan de participación en los beneficios hasta un nuevo debate.

El proyecto también dispone varias medidas secundarias para alentar la aplicación de todo tipo de participación en los beneficios. Además, señala que dicha participación dentro de la empresa también podría adoptar la forma de asignación de complementos salariales (vales restaurante, bonos para vacaciones, cheque de empleo para un servicio universal, varios vales regalo, etc.).

El Primer Ministro francés declaró: «Estoy realizando un compromiso en nombre del gobierno: respetaremos el compromiso alcanzado entre los interlocutores sociales y propondremos la transcripción fiel y total de este acuerdo en ley». Este acuerdo es la prueba principal de que, pese al contexto (el conflicto sobre la reforma de las pensiones), el diálogo social continúa y está dando frutos». 

Geoffroy Roux de Béziers, Presidente del Movimiento de Empresas de Francia (MEDEF), comentó: «Espero que el gobierno renueve este acuerdo» y añadió: «considero que toda infracción de este acuerdo sería asestar una puñalada en la espalda de los interlocutores sociales».