El Gobierno había anunciado la introducción de este cambio para antes del 25 de diciembre.

Según el proyecto de ley, que modifica la Ley de Relaciones Laborales del año 2000, todo empleador, con independencia de su tamaño, puede hacer una oferta de empleo que incluya un período de prueba a un nuevo empleado. 

Previamente, los períodos de prueba de 90 días solo se aplicaban a empleadores con menos de 20 empleados.

El período de prueba debe acordarse por escrito y de buena fe (no se puede obligar a un empleado a trabajar en período de prueba) en el contrato de trabajo antes de que el empleado comience a trabajar.

Los empleados no pueden estar en período de prueba si ya han trabajado antes para ese empleador.

No obstante, si un empleado es miembro de un sindicato y trabaja en virtud de un convenio de negociación colectiva, no puede realizar un período de prueba (según sus términos y condiciones) que entre en conflicto con el convenio de negociación colectiva.

Esta medida ya existía, y Business New Zealand abogó firmemente por su regreso. En el documento que resume las necesidades de las empresas, se indicó de manera expresa el restablecimiento de un período de prueba de 90 días para todos los nuevos empleados de empresas de todos los tamaños.

La enmienda debería proporcionar certidumbre a las empresas, que ahora pueden incluir esta cláusula en los contratos de trabajo.

«Que todos los empleadores puedan aplicar períodos de prueba a 90 días ofrece a las empresas la confianza necesaria para contratar a nuevas personas y aumenta la flexibilidad laboral», afirmó la Ministra van Velden.