Según Statistics Canada, en 2022, las mujeres de Columbia Británica ganaron un 17 % menos que los hombres. Los salarios promedio para los hombres fueron de 35,50 dólares canadienses por hora, mientras que las mujeres ganaron un salario promedio de 29,53 dólares canadienses por hora. Esta brecha fue aún mayor para las mujeres indígenas, racializadas y recién incorporadas al mercado laboral.

La nueva legislación es el resultado de la colaboración con los socios indígenas, las asociaciones empresariales, los sindicatos, las asociaciones de empleados, los defensores jurídicos y del empleo, los ayuntamientos y los sectores públicos y sin ánimo de lucro para garantizar que el hecho de abordar la brecha salarial vaya más allá del binario de género.

Exige a los empleadores que incluyan rangos salariales en las ofertas de trabajo y les prohíbe pedir a los solicitantes de empleo información sobre su historial salarial.

Además, se exigirá a los empleadores, de forma gradual, que hagan públicos los informes sobre su brecha salarial por motivos de género: todos los empleadores con 1000 empleados o más deberán publicar informes antes de noviembre de 2024; aquellos con 300 empleados o más, en noviembre de 2025, y todos los empleadores con más de 50 empleados deberán presentarlos antes de noviembre de 2026.

Cada año, antes del 1 de junio, el Ministerio de Hacienda publicará un informe anual que servirá como fuente de información centralizada sobre la remuneración salarial por géneros en Columbia Británica.

A nivel federal, como informamos previamente, la Ley de Igualdad Salarial entró en vigor el 31 de agosto de 2021. Estipula que los empleadores regulados a nivel federal con diez o más empleados tienen tres años para desarrollar y poner en marcha sus planes proactivos de igualdad salarial.

La igualdad salarial sigue siendo una de las prioridades del Gobierno canadiense y sus provincias, y los empleadores deben adaptarse a las nuevas disposiciones.