Esta nueva edición confirma que, en todo el mundo, los empleadores están lidiando con un panorama complejo marcado por los avances tecnológicos, los cambios demográficos y un énfasis creciente en la equidad y la inclusión en el lugar de trabajo.
El acuerdo de la Unión Europea sobre los trabajadores de plataformas y la adopción de la Ley de Inteligencia Artificial desencadenarán cambios normativos a nivel nacional. Las empresas de plataformas deberán revisar sus modelos empresariales en consecuencia.
En África, el libro blanco sobre el papel de la inteligencia artificial en la integración del talento migrante en la fuerza de trabajo resalta el potencial de la tecnología para mejorar la diversidad y la innovación. Se anima a los empleadores a utilizar la IA para aprovechar una reserva de talento más amplia, abordar la infrautilización de competencias y fomentar un entorno de trabajo más inclusivo.
El consenso de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre los salarios vitales a través del diálogo social destaca la importancia del proceso colaborativo de fijación de salarios. Se insta a los empleadores a participar en negociaciones constructivas con los trabajadores, con el objetivo de adoptar políticas salariales sostenibles que reflejen tanto las realidades económicas como las necesidades de la fuerza de trabajo.
A nivel nacional, varios países han hecho grandes progresos con a reforma de sus leyes laborales para adaptarse al cambiante panorama del trabajo. La nueva legislación laboral de Mozambique, las modificaciones de la Ley Federal del Trabajo de México y el Proyecto de Ley para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo de los Países Bajos representan esfuerzos para modernizar los marcos legales como respuesta a los cambios tecnológicos, demográficos y sociales.
Las respuestas y estrategias en materia de políticas de Hong Kong, Irlanda y Australia reflejan el reconocimiento mundial de la necesidad de unos entornos de trabajo flexibles e inclusivos. La flexibilización de la norma «418» de Hong Kong, el Repertorio de Recomendaciones Prácticas de Irlanda para empleadores y empleados sobre trabajo flexible y a distancia y la publicación de los datos de la brecha salarial de género por parte de la Agencia para la Igualdad de Género en el Lugar de Trabajo de Australia contribuyen a un movimiento más amplio hacia la consecución de la equidad y la adaptabilidad del lugar de trabajo.
Mientras que los empleadores de todo el mundo afrontan estos acontecimientos, la imperiosa necesidad de equilibrar el cumplimiento normativo con el fomento de un lugar de trabajo innovador, inclusivo y flexible nunca ha sido tan crítica. El futuro del trabajo exige un enfoque estratégico y proactivo para lidiar con el cambiante panorama de las relaciones laborales y el derecho laboral, con el que se garantice que las empresas cumplan las nuevas normativas y prosperen en un mercado competitivo, diverso y avanzado tecnológicamente.